24/3/07

La gayada, Uno de los de allá

A mi me dieron un saludo cortés, de esos que no se esperan y terminan robando un par de minutos (tal vez horas) luego del casual encuentro. Pero acá las cosas funcionan de manera distinta. Acá los saludos pueden ser disimulos, estrategias. A un apretón de brazos o a un golpecito en la espalda no se les lee de la manera corriente. Un discurso no es una oferta, es populismo. Seductor por cierto, pero de carne esponjosa, de procedencias dudosas. Porque acá, acá la duda hace presencia en los escenarios de crédito. No son casuales los intereses ni las alarmas. Acá lo fundamental no es lo que allá. Los temas que para ellos son admisibles en discusiones corrientes están resueltos hace bastante, ya no se tocan. Acá los edificios se construyen con fierro sobre el cemento. Acaso existen pilares frágiles, se disimulan y se exterminan. Se exterminan disimulando, hasta que llega un momento en que se disuelven de la memoria colectiva, mucho más rápido de lo que dura la duda. Acá nos sirve saber quien hizo. ¿Y el porque? el porque es casi fundamental cuando el discurso se titula justo. Luego el porque también vive donde viven los pilares, y si se cae alguno, se pega con los mismos pilares derretidos. Se pueden derretir los pilares con los mismos artefactos que utilizamos para fundir el acero y los metales para fabricar espuelas. Acá hay todo un mundo distinto al de allá, aunque aparentemente seamos los mismos personajes. Si tienen ellos algunos porqués, acá también los tenemos. Nuestra gran diferencia es el lenguaje, y donde situamos las palabras, donde consideramos sutil acomodar el porque y la duda. Donde creemos prudente cuestionarse y donde es preciso abstenerse. La diferencia como les digo, esta en que acá ya consideramos resueltos ciertos aspectos que para ellos no deben cerrarse. ¿Historia, Arte, Filosofía, Ciencia? Nosotros acomodamos el porque en el sitio que mas nos convenga, no pretendemos justificar lo hecho situando la duda en sus principios fundamentales, en una totalidad. Nosotros gustamos de las parcelas, se nos hace mas fácil, mas cómodo, más utilitario y mas práctico. Acá la gente se caracteriza por ser práctica.
Y con respecto al saludo que me dieron al principio, el calificativo de cortés yo lo acomodo un poco mas adelante de lo que lo acomodarían los señores de allá. Porque debo reconocer que mi primera reacción, casi automática, fue revisarme el bolsillo, buscar si la billetera, el celular y la cadena estaban en su lugar habitual; echarle un vistazo al cierre de la mochila para ver si seguía cerrado. Y luego de ver que todo estaba en su correcto orden (porque acá si existe lo correcto, eso también ya lo tenemos resuelto gracias a nuestra santísima iglesia). Insisto, luego de ver que todo estaba en su correcto orden, recién suspire y pensé "que cortés, muy agradecido".



Discurso encontrado por alguien que para el narrador del texto corresponde a los de allá, seleccionado para este sitio como ironía pujante.

1 comentario:

Ariel Soza dijo...

:) Estan invitados todos los grillos y pajas al viento que pasean de vez en cuando por mi blog a visitar un sitio primo.

www.lagayada.blogspot.com

Lugar de combinacion con la linea 4